Desde su salida del Gobierno en los primeros meses del año, Alejandro Gaviria sigue dando de qué hablar con sus feroces críticas al gobierno en general y, de manera específica, a la reforma a la salud.
Sus desacuerdos en ese sentido le han significado convertirse en una de las personas más contradictorias de los proyectos del Pacto Histórico en el Gobierno.
En su cuenta de X dio a conocer una diatriba en la que cuestiona la efectividad de los proyectos trazados desde el Ejecutivo.
El gobierno del presidente Petro quedó atrapado en una reforma a la salud disfuncional que no tiene apoyo popular y puede causar una movilización en su contra. Si no se aprueba, será una derrota que dejaría al gobierno muy mal parado al empezar el tercer año. Sin gobernabilidad y políticamente debilitado.
Añadió que "seguramente el gobierno tratará de evitar ese escenario a toda costa en el Senado. Entregarán lo que tengan que entregar, lo que, a su vez, entorpecerá la ejecución y afectará negativamente todos los planes y propósitos. Cualquier escenario es malo. La reforma a la salud resultó siendo una pésima apuesta para el gobierno".
Lo que viene para la reforma a la salud; ¿una prueba de fuego?
La reforma a la salud está en uno de sus mejores momentos de cara al gran debate nacional que representa. Su más reciente triunfo en la Cámara de Representantes ha levantado la moral de la bancada progresista -Pacto Histórico-, cuyos senadores ya anunciaron la batalla que darán en su corporación para hacer de este proyecto una ley de la República.
Y es que fueron múltiples las tensiones políticas provenientes de esta reforma, que cambió el panorama político del Congreso.
Fueron 133 artículos los aprobados desde la Cámara y es la estructura misma del sistema de salud la que está en juego. De ahí que el debate sea tan álgido, sin tregua para ninguna de las partes en debate.
¿Qué pasará con la reforma a la salud?
Esa respuesta la dará de manera conjunta el Senado de la República. Allí se definirá la suerte de esta reforma sobre la que cada vez más personas se pronuncian.
Y es que la posición del Pacto Histórico, a través de todos sus congresistas, es que no hay mucho espacio que cederles a las EPS. Martha Peralta ha dicho a medios de comunicación que:
“El sistema de salud necesita una reestructuración urgente, algunas EPS no pueden seguir lucrándose mientras los colombianos mueren en las salas de espera, por falta de atención o esperando un medicamento vital”.
Cabe recordar que en Cámara fueron 87 votos los que avalaron la reforma, mientras 37 se opusieron con voto negativo.
Alfredo Mondragón, representante valluno, ha sido uno de los principales ponentes y defensores de la reforma. De ahí su mensaje de celebración, pero también de llamado a sus colegas en el Senado para que no dejen hundir esta, una de las reformas más importantes en el llamado 'Gobierno del Cambio'.
