En el mundo se ha planteado que 2019 es un año trascendental en términos medio ambientales. Dentro de esta ambición mundial, se espera fortalecer una de las más novedosas tendencias del último tiempo en cuanto a eliminación de residuos y desechos urbanos. Se trata de la utilización de cucarachas como mecanismo para cumplir esta vital labor para ayudarle al planeta.
El proyecto de orden ambiental nació en la ciudad de Jinan, en China, donde se diseñó un mecanismo para eliminar estos desechos con el objetivo de contrarrestar los altos niveles de contaminación de gases de efecto invernadero, presentes en sus localidades.
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Al implementarlo, los orientadores han asegurado que las cucarachas cumplen un papel fundamental porque se comen toneladas de comida desechada en los ambientes húmedos y cálidos, ayudando a eliminar desperdicios.
En esta ciudad asiática, existe una granja de cucarachas que se encargan de hacer esta labor de limpieza y se estima que allí existen unas mil millones de cucarachas, que están encargadas de consumir unas 50 toneladas de desechos, unos siete elefantes adultos.
Según información de los medios chinos, esta granja es un modelo de cuidado ambiental ya que permite que se limpien rápidamente miles de kilos de desperdicios y le estima que se crearía un proyecto para abrir más de estas granjas en los próximos años.
Más allá del asco cultural que existe en latinoamérica por estos insectos, en Asia no solo los utilizan como comida, sino también como limpiadores que tiene el potencial de procesar un tercio de los desechos de China.
En territorio chino, algunos miembros del gobierno han planteado que las cucarachas son un camino 'biotecnológico' que permitiría brindarle un apoyo fundamental a la eliminación de los desechos alimenticios.
