Desde este 19 de diciembre, jugadores vinculados a la Federación Cubana de Béisbol (FCB) podrán ser contratados por equipos de las Grandes Ligas (MLB) de Estados Unidos, de acuerdo a un convenio firmado entre ambas organizaciones.
"El convenio, materializado después de tres años de negociación, asegura una relación de colaboración, estable y no politizada, entre la MLB y la FCB", subraya la nota de prensa emitida por el Instituto Nacional de Deportes, Educación Física y Recreación (INDER).
Hasta el momento, un cubano que quisiera jugar en la élite beisbolera de EEUU debía abandonar definitivamente la isla, según las reglas impuestas por la organización deportiva estadounidense.
El acuerdo firmado entre la FCB y la MLB, que permitirá que beisbolistas cubanos puedan ser contratados por cualquiera de los 30 equipos de las Grandes Ligas de EEUU, se rubricó con el consentimiento de la Asociación de Jugadores de la MLB (MLBPA).
Entre las consideraciones calificadas como históricas, el convenio establece que los jugadores cubanos podrán desempeñarse en la liga profesional estadounidense sin perder su residencia en la isla caribeña, ni su vínculo con el béisbol local.
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Sus cláusulas —agrega la nota del INDER— son similares a las establecidas por la MLB con otras ligas foráneas como la Liga Japonesa de Béisbol Profesional (NPB, por sus siglas en inglés); la Liga de la Organización Coreana de Béisbol (KBO) y la Liga de Béisbol Profesional de Taipei de China (CPBL).
"Representa además un modo legítimo y conforme a la práctica internacional, para que los peloteros cubanos puedan jugar sin discriminación, en igualdad de condiciones, en la MLB, sin verse obligados a romper nexos de ningún tipo con su país", precisa el texto.
Como resultado de este acuerdo, Cuba deberá liberar a todos los jugadores contratados con al menos 25 años y 6 o más años de experiencia en la Serie Nacional, y la federación cubana recibirá un pago de una tasa de liberación, totalmente independiente al contrato que logre el pelotero.
También será aplicable para los jugadores cubanos que hayan emigrado a terceros países para intentar llegar por esa vía a las Grandes Ligas, y que por diversas razones no lo hayan logrado y se reinserten de nuevo en el sistema competitivo de la isla.
El INDER subraya además que este convenio contribuirá a frenar actividades ilícitas como el tráfico de personas, que durante varios años han puesto en riesgo la vida e integridad física de muchos jóvenes talentos del béisbol cubano y de sus familias.
Las autoridades deportivas cubanas consideran que este acuerdo es un reconocimiento al deporte local.
