El reconocido empresario
Julio Gerlein Echeverría afirmó que las acusaciones en su contra hechas por
Aída Victoria Merlano, hija de la excongresista condenada por corrupción Aída Merlano, son falsas y que jamás la ha amenazado de muerte.
El cruce de versiones inició cuando la joven dijo a través de su cuenta de Instagram que, al reunirse con Gerlein para buscar su apoyo económico y protección, este le respondió que él y sus dos hermanos
"querían pegarle 17 tiros porque estaba muy bocona".
"No soy de esconderme, porque si algo me ha caracterizado es dar la cara. Yo digo las cosas tal cual son y esta que acabo de decir, es parte de la gran verdad", manifestó.
Aída Victoria anunció que está buscando asesoría para iniciar acciones legales en contra de quien considera su padre y también para afrontar la situación que vive desde la fuga de su madre.
Gerlein salió a defenderse
El empresario barranquillero aseguró en una comunicación que lo dicho por la joven en redes sociales es "absolutamente falso" y que jamás en su vida ha utilizado expresiones de esa naturaleza.
"Creo que obedece a estrategias de solicitudes de dinero tal y como ella misma lo reconoce", señaló.
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Agregó que no le parece casualidad que estas acusaciones se hagan en el mismo día que se iba realizar la audiencia preparatoria de juicio en su contra.
"No es casual que semejante afrenta a mi nombre y al de mis hijos se haga premeditadamente el día de mi audiencia", indicó.
Hasta mayo de 2020 iniciará el juicio
La diligencia judicial que había sido citada para este martes 10 de diciembre en el Centro de Servicios Judiciales de Barranquilla (Atlántico) en contra de Julio Gerlein fue aplazada por solicitud de la defensa.
El funcionario judicial avaló la petición y la programó para el mes de mayo de 2020.
Gerlein es investigado por, presuntamente, financiar y liderar la empresa ilegal involucrada en la compra de votos de Aída Merlano para el Senado. La Fiscalía General lo señala de haber girado 47 cheques por más de mil millones de pesos para la realización de estas actividades ilícitas.
El empresario tendrá que responder en los estrados por la presunta comisión de los delitos de corrupción al sufragante, concierto para delinquir y violación de los topes de campañas.
