El último informe de la ONU, publicado el pasado 11 de marzo, relata la situación de Sudán del Sur en materia de derechos humanos como "una de las más espantosas" del mundo.
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El documento, basado en versiones de víctimas y en cifras oficiales, indica que durante el período que se examinaron a Sudán del Sur, hallaron miles de incidentes de violencia sexual relacionada con los conflictos en todo el país, especialmente en lugares donde había una fuerte presencia de actores armados.
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Informes locales dan cuenta de varios hechos en los que reportan grupos de 20 a 30 mujeres violadas por soldados o personas armadas simpatizantes con el gobierno local.
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Algunas de la víctimas narraron, entre otro casos, que varias madres lactantes habían sido secuestradas y mantenidas en cautiverio por un grupo de soldados armados de Dinka SPLA. Narraron las víctimas que los soldados del Gobierno las sometieron como esclavas sexuales, en condiciones de vida muy duras, con acceso limitado a alimentos y agua.
En febrero de 2015, otra mujer contó cómo había sido obligada a casarse con un soldado del SPLA, y luego fue sometida por su esposo a esclavitud sexual y tortura.
También, dentro de las versiones que conoció la ONU, había historias de varias mujeres que presenciaron la muerte de sus maridos a manos del ejército, con el único fin de violarlas durante varios días. Varias de las mujeres y niñas que eran abusadas por los soldados también terminaron siendo asesinadas por sus victimarios.
El informe indica, basado en 'fuentes confiables' que a los soldados y grupos aliados al gobierno se les permitió a violar a las mujeres a cambio de salarios. Al parecer la violación a mujeres y niñas era una contraprestación por sus servicios militares.
El documento dice que que mujeres embarazadas, madres lactantes y menores de edad no se han salvado de ser víctimas de los reiterados abusos.
"Si nos fijamos en la cara de ellos cuando lo están haciendo, te matan", dijo una de las mujeres que narró haber sido abusada por cuatro soldados del gobierno.
La ONU dice que aunque no se ha reconocido la participación del gobierno en estos casos, las autoridades nacionales han reconocido la gravedad del problema y han dado algunos pasos hacia la eliminación de la violencia sexual y de género. "Sin embargo estos hasta el momento no se han traducido en la rendición de cuentas por violaciones".
De abril a septiembre de 2015 se estima que, según el informe de la ONU, hubo en el país africano al menos 1.000 civiles muertos, 1.300 mujeres y niñas violadas y 1.600 las mujeres y los menores secuestrados.
El informe dice que incluso las mujeres que estaban en los campamentos protegidos de la ONU para refugiados no han sido lugares seguros para las mujeres y las niñas, porque incluso se han presentado casos de abusos a quienes se alejan de los resguardos en busca de leña o comida.
La guerra de Sudán del Sur, el país más joven del mundo, se inició en diciembre de 2013. El caos reina en este país de más de 10 millones de habitantes, donde han muerto cientos de miles, se han desplazado más de 2 millones de personas y más de 40.000 viven en hambruna.
