Extranjeros en Colombia, a proposito de los Cubanos

En esta época de fin y comienzo de año podemos notar en cada una de nuestras ciudades un desfile de viajeros mochileros que se interesan en visitar nuestro país, eso está muy bien, que se incentive el turismo que se mueva el comercio y que ingresen dólares y euros a las arcas de nuestros paisanos. Pero no todo va tan bien, cuando esos extranjeros ven este humilde destino como la montaña rusa que no encuentran en sus países, según pude escuchar a alguno de estos personajes, aquí en Colombia sienten la muerte mordiéndoles la nuca y respirándoles en el cuello y así les despierta el valor por la vida que por ser sus países tan planos y aburridos se pierde con la falta emoción. Venir a Colombia es divertido, es barato, bonito y no se necesita mucho papeleo además algunos habitantes no escatiman en rendir exageradas pleitesías lo cual encanta al foráneo. El extranjero es aquel que por estos dias no saben donde poner, parece la pieza del pesebre que mas sobresale; salir con un extranjero cuando los sitios están concurridos es ventajosísimo, por ejemplo en la tristemente célebre feria de Cali tiene sus beneficios ya que podría desplazar a cualquier indio peinado en la fila de restaurante o sitio donde Ud. quiere ingresar y de esa forma se recibe una mejor atención por los otros integrantes de la tribu local. Algo que no me gusta y de lo cual me siento avergonzado es que algunos extranjeros, por lo menos en Cali ( suizos, franchutes, de donde quiera que sean ) vienen a inyectarse y fumarse cuanta droga puedan, (se meten todo lo que no se meten en toda una vida) y a hacer uso de sus buquets europeos y encantar nuestras paisanas incautas que caen tristemente en sus brazos o piernas dejando al local viendo un chispero. Señores y señoritas no se dejen deslumbrar por estereotipos lejanos, valore lo de su tierra, al fin y al cabo son simples mortales igual que el producto local a veces hasta con menos plata, ya que les gusta tanto, piensen que el nativo finalmente esta mas a la mano en caso de cualquier reclamo nueve meses después, luego pasa diciembre y esas noches fugaces pasan factura y Ud. señorita donde va hacer reclamo a miles de kilómetros ?. No olvide dar prioridad al producto local, el Colombiano raso es alegre y dicharachero, tiene amigos ilegales en otros países, le dice “yunais” a los Estados Unidos y no habla ingles pero lo entiende, así que no se desviva por esos extranjeros, cuide su Colombiano.