Se cumplen 38 años de la erupción del Nevado del Ruiz que terminó lamentablemente desapareciendo todo el municipio de Armero, Tolima. La tragedia que fue noticia a nivel mundial, cobró la vida de aproximadamente 20 mil personas, entre ellas varios niños y personas de la tercera edad, es así como una de las caras de estos hechos fue Omayra Sánchez, una joven que fue grabada durante más de 60 horas en medio del lodo y los restos de su casa.
En este nuevo capítulo de Zona Paranormal, Raúl Arévalo y David Palencia, entrevistaron al parasicólogo Eduardo Escoto, quien ha tenido la posibilidad de recorrer las ruinas del municipio, buscando un poco fenómenos extraños.
A la pregunta de ¿Cómo es caminar por un lugar en el que hubo tanto sufrimiento y murieron tantas personas?, Escoto afirmó que solo aquellos que tienen la facultad de sentir la percepción extrasensorial, pueden percibir "mucho dolor, tristeza, desesperación y la angustia de quienes fallecieron".
Acto seguido el parasicólogo hizo referencia a la dificultad de investigar allí, pues según él: "la seguridad es un tema a tener en cuenta".
"Nosotros hacemos un estudio del territorio de día, allí identificamos de primera mano si hay algún hueco, o el techo de una casa que se pueda caer y lastimarnos, o en su defecto que haya delincuencia común que ponga en juego nuestras vidas", aseguró el experto en fenómenos paranormales.
Vea el capítulo de Zona Paranormal sobre la tragedia de Armero aquí:
Eduardo Escoto afirma que ha tenido la posibilidad de entrar al lugar dos veces, y que en las dos ocasiones siempre vivió experiencias diferentes, siendo el cementerio de Armero un lugar que le llamó la atención, ya que "encontramos tumbas abiertas y cuerpo momificados, esqueletos y trabajos de magia negra".
Respecto a Omayra Sánchez, Eduardo compartió con el equipo de Kienyke.com la experiencia que vivió en la tumba real de la niña de 13 años que falleció. Allí el experto asegura que trató de comunicarse con Omayra o con cualquier niño pero no fue posible, solo evidenció en su video después, que uno de los juguetes que le dejan en la tumba a la niña, se movió.
Escoto explica que ya en el cementerio, a través de los dispositivos lograron escuchar una risa de un niño o una niña, algo que llamó la atención de todo su equipo de trabajo.
"Donde hay lugares en los que se hace brujería, hay energías demoniacas que se hacen pasar por niños, esto es un factor a tener en cuenta para nosotros porque nos pone en riesgo".
Finalmente, Eduardo hizo referencia que hay que tener cuidado al hablar de una tragedia que enlutó no solo al país sino al mundo entero.
